ACNE Y EJERCICIO

ACNE Y EJERCICIO

La actividad física es indudablemente beneficiosa no solo para nuestro organismo, sino también para mejorar la calidad y luminosidad de la piel, como se ha mencionado en publicaciones anteriores. Sin embargo, surge una pregunta frecuente: ¿puede el ejercicio físico empeorar o causar acné, especialmente debido al sudor?

La respuesta es NO. Por lo tanto, si esta era tu excusa para evitar el entrenamiento, tendrás que reconsiderarla. Varios estudios han demostrado que no existe una relación directa entre el sudor y los brotes de acné.

Entonces, ¿qué podría incrementar el riesgo de acné durante el ejercicio? Quizás el factor clave sea la oclusión. Si observas la ropa de entrenamiento, suele ser ajustada, y el tipo de tela que se utilice es relevante, ya que debe permitir una rápida absorción del sudor y mantener la piel fresca. Afortunadamente, en la actualidad, la ropa de entrenamiento se diseña teniendo en cuenta estas cualidades. Además, algunas telas pueden generar fricción e incluso irritación y alergias, por lo que el “outfit” sí importa.

A continuación, se presentan algunos consejos básicos para evitar la exacerbación del acné durante el entrenamiento:

1. ¡Por favor, nunca hagas ejercicio maquillada! Este es un punto imprescindible. Los productos oclusivos, como el maquillaje, siempre obstruirán los poros y favorecerán el acné, independientemente de si haces ejercicio o no.

2. Escoge cuidadosamente la ropa para entrenar, dando preferencia a prendas con tecnología “Dry-fit”. Después de entrenar, siempre dúchate y retira la ropa sudada y oclusiva. A menudo, nos quedamos con la ropa húmeda y sudada después del ejercicio, lo cual no es recomendable. Utiliza jabones suaves para ducharte, evita los antibacteriales y los que tienen fragancias fuertes. La acumulación de células muertas, bacterias y grasa en prendas sin lavar puede obstruir tus poros y predisponerte a brotes de acné.

3. Los exfoliantes son útiles, pero su uso debe ser ocasional (máximo 1-2 veces por semana). La fricción repetitiva en áreas con acné también puede empeorar la inflamación de las lesiones.

4. Evita entrenar durante las horas de mayor sol y calor para mantenerte fresco e hidratado.

5. Consulta a un dermatólogo para elegir los productos adecuados para tu rutina de cuidado de la piel. Aunque las vendedoras de farmacias o tiendas duty-free pueden ofrecer recomendaciones, siempre es mejor contar con la asesoría de un especialista que pueda personalizar los productos según tus necesidades. No compres productos sin antes preguntar y obtener una buena asesoría.

Siguiendo estos consejos, podrás disfrutar de los beneficios del ejercicio físico sin preocuparte por agravar el acné. ¡Anímate a entrenar y cuidar de tu piel al mismo tiempo!



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